El Barrio
Se derrumbó una medianera en García del Río y Cramer
Ocurrió esta tarde, consecuencia de una obra en construcción lindera a la vivienda afectada.
La cálida tarde de una familia se vio interrumpida cuando la medianera de su patio se derrumbó por completo, consecuencia de las obras que estaban realizando en una construcción lindera a su domicilio, en la avenida García del Río, a metros del cruce con Crámer, en el barrio porteño de Saavedra. Si bien no hubo que lamentar heridos, sí se produjeron distintos daños materiales.
“Estaba adentro de mi casa con mi cuñada y mi señora, que tiene un taller en el patio, y de repente escuchamos un estruendo muy fuerte. Nos asomamos, vimos que nuestra medianera ya no estaba y que se había caído todo el cemento de la obra en nuestro lado. Quedó un boquete de dos metros por dos”, le expresó uno de los dueños de la propiedad a Saavedra Online. Y agregó: “Cuando pasó, estaban cementando. No sabemos bien qué sucedió o cuál fue el motivo. Pero si en ese momento justo pasaba alguien, se le caía todo encima. Tenemos que estar alejados de la zona hasta que corroboren los daños”.
Segundos después de que sucediera el accidente, los integrantes de la vivienda se comunicaron con el 103, que responde a emergencias de Defensa Civil. Luego de que se acercara un camión con grúa incorporada con su respectivo personal, la cuestión pasó a manos al Departamento de Infraestructura de la Ciudad, que debe enviar una patrulla para evaluar si en el terreno hay algún riesgo estructural. Es decir: si existen chances de derrumbe o alcanza con apuntalar para poder continuar. En caso de que haya algún peligro de desprendimiento, la construcción debe ser suspendida.

No es el primer inconveniente que esta familia padece: “Nosotros ya hicimos varias denuncias porque con anterioridad habíamos sufrido rajaduras en el piso y desniveles en la puerta de la reja de entrada. Comparado con lo que sucedió, son daños menores, pero necesitamos una solución. También nos quejamos por los ruidos molestos”, sostuvieron ante este medio.
Por cuestiones lógicas, las labores en el lugar se detuvieron luego del incidente y algunos de los obreros todavía se encontraban en el predio cuando arribó Defensa Civil y una efectiva de la Policía de la Ciudad, quienes se encargaron de llevarle tranquilidad a la familia de la vivienda y a los vecinos de la zona que se acercaron.
Las tareas de construcción, que comenzaron con el derrumbe de una casa de dos pisos, llevan entre ocho y doce meses. El resultado final será un moderno edificio que tendría, en principio, tres subsuelos y tres pisos de altura. “Es un terreno gigante, todavía queda mucho tiempo de trabajo”, concluyó el propietario.


