Antes de licitar la concesión del bar en la Biblioteca, ya se realizaban obras sin cartel en el Museo Saavedra

El Museo Histórico Cornelio de Saavedra (Crisólogo Larralde 6309) es noticia por estos días debido a la licitación pública impulsada por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires para concesionar un bar durante cinco años en la edificación antigua donde se emplazó su biblioteca. No obstante, previo a ello este espacio que en octubre cumplió 100 años llevaba adelante distintas tareas de ampliación.

Desde hace varios meses se construye una edificación rectangular a metros del antiguo casco de estancia, cerca del cruce de Crisólogo Larralde y la colectora de la avenida General Paz.

Al respecto, vecinos informaron que, a través del Consejo Consultivo Comunal, presentaron un Pedido de informes a las autoridades de la Comuna 12 porque el lugar no contaba con cartel de obra. El mismo fue remitido por el presidente de la Junta a la Dirección General de Patrimonio, Museos y Casco Histórico, según la información recabada por Saavedra Online.

Foto: Saavedra Online

Cabe señalar que la gestión del Museo, lejos de ser abierta a la comunidad, se caracteriza por un fuerte hermetismo. En ese contexto, Saavedra Online pudo saber que el nuevo recinto será destinado a “Baños nuevos y talleres”. 

Tiempo atrás, en la previa de los festejos del centenario, fuentes del Ministerio de Cultura porteño informaron a este medio que se realizaban tareas de “mantenimiento edilicio, renovación y ampliación de los espacios de exhibición”.

Al estar compuesto el Museo de construcciones que datan de fines del siglo XIX (el casco de estancia que perteneció a Luis María Saavedra), sorprende que se lleve adelante este tipo de obra cuyo estilo arquitectónico dista del que tienen los edificios principales.

Foto: Saavedra Online

Por esta y otras obras es que el museo no contaba con recorridos de forma presencial, sí con una activa divulgación en redes sociales y eventos virtuales. Tampoco participó de la Noche de los Museos, realizada el pasado 30 de octubre.

En tanto, la licitación para concesionar el bar contempla la “demolición de tres (3) paredes internas” de la edificación antigua, según figura en los documentos oficiales, lo que generó una fuerte polémica.